7 may 2011

La Señora de la Casa de Pilatos: Mary Cassatt




Audio (1)
Mary Cassatt Stevenson
Pintora Norteamericana
Pennsylvania 1844- París 1926

He estado mirando por la ventana.Es un lugar precioso. Si sales de París en enero sera como llegar al paraíso.
Mary Cassat
Sevilla octubre de 1872.


Después de la corrida de toros
(Toreador) 1873-Óleo
Art Institute of Chicago, Chicago, IL, USA
Luego de varios meses en Italia estudiando y copiando los frescos de Correggio en Parma, María Stevenson Cassatt emprendió un viaje sola a España. Se registró como copista en el Museo del Prado y trabajó sobre los maestros españoles; Velázquez, Murillo y Goya. Tres intensas y maravillosas semanas de actividad y observación le hicieron replantearse su propio manejo de la pintura.

Ofreciendo el Panal al torero
1873-Óleo
Sterling and Francine Clark Art Institute
Williamstown, Massachusetts
Era la primera vez que Mary Cassatt visitaba Sevilla y gracias a las gestiones del Manuel Becerra-intendente del duque de Medinaceli- la pintora norteamericana logró instalar su estudio en la histórica Casa de Pilatos en el otoño de 1872. En esa estadía de varios meses, los sevillanos la conocieron como “La Señora de la Casa de Pilatos”.

Y fue en España cuando, por única vez, la pintora introdujo figuras masculinas en sus retratos, una serie de cinco óleos, destacando entre ellos sin embargo, el de una mujer; Una Señora de Sevilla, su mejor pintura española, un retrato franco, sólido, y sin ninguna concesión al tipismo, un adelanto de la gran retratista que llegaría a ser.

Una Señora de Sevilla
1873-Óleo
Quizás la influencia de la pintura sobre temas españoles; de pintores como Edouard Manet; las obras del pintor escocés John Phillip; y Viajes por España de Théophile Gautier (1845), donde el autor da amplios detalles gráficos de la tradición taurina, inspiraron a la artista para representar temas convencionales de la época. Por supuesto, no escaparon al ojo de la artista, las sutiles relaciones de género en Sevilla que fueron magníficamente capturadas con encanto romántico, como observamos también en el lienzo El coqueteo -Un Balcón de Sevilla- dejándose cautivar por las costumbres e indumentarias españolas.

Un Balcón de Sevilla
1873-Óleo
Philadelphia Museum of Art
Philadelphia, PA, USA
En 1874 Cassatt decide trasladarse definitivamente a París después de haber conciliado su admiración por los viejos maestros con un estilo técnico más atrevido. Se fue acercando a la contemporaneidad, alejándose de lienzos como los del maestro de Édouard Manet. Una vez residenciada en París mantuvo una estrecha relación con Edgar Degas, quien le presentó a sus amigos; Claude Monet, Auguste Renoir, Camille Pissarro y otros rebeldes impresionistas.

Mary Cassatt continuó pintando, dirigió su creatividad artística hacia las mujeres modernas de su tiempo, sus vidas cotidianas, escenas familiares con especial énfasis en los lazos íntimos entre las madres y sus hijos, escenas percibidas por una artista vivaz, dinámica que tenía una visión optimista de la vida.

Mary Cassatt ambicionaba ser una pintora de la vida moderna y plantó las semillas de su deseo en España. Estas “florecieron” tiempo después, cuando la mujer arribaba a los 30 años y se encontraba instalada definitivamente en París, capital mundial del arte, en 1874.

(1)Audio.
Roque Baños.
Sevillana para Carlos.