17 abr 2010

Las cigarreras de Gonzalo Bilbao
Las Cigarreras de Sevilla


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Jorge Pardo
Vente conmigo ( Por Tangos)


Las Cigarreras de Sevilla
Gonzalo Bilbao Martínez
Pintor español
Sevilla 1860 - Madrid 1938

Para todos la vista es imponente, la atmósfera dentro de la fábrica transmite por brevísimos momentos un ambiente casi conventual,el artista además evoca por un instante el cuadro de las Hilanderas de Diego Velázquez.

Brillantes miradas le observan; algunas son muy jóvenes, vestidas ligeramente con trajes de percal, lían cigarrillos delante de las mesas relucientes por el largo manoseo. Ya Théophile Gautier quien había estado en España en 1840 dejaba constancia de sus impresiones:

{...} La cigarrera de Sevilla es un tipo, como lo es el de la manola de Madrid. Hay que verla, el domingo o los días de corridas de toros, con su basquiña con unos inmensos volantes como flecos, sus mangas con botones de azabache. {...}(1)

Detalle Las Cigarreras
Óleo 1915
Jules Claretie oye un golpe de campana:

{...}Tienen la misma gracia sana y apetitosa. Estos millares de cabezas morenas donde, aquí y allá, amarillean algunas cabelleras de oro; estas cabezas vivas agitadas, todas adornadas de flores rojas; estas blusas entreabiertas, estas faldas claras, estos niños en las cunas, situados al lado de sus madres y que ellas mecen mientras trabajan; estos vestidos colgados en la pared, como los cachivaches en casa del revendedor; este sol andaluz jugando sobre estos brazos redondos, sobre estos cuellos elegantes, sobre estas manos que lían alegremente {...}Recuerda el curioso Claretie que en una ocasión, al entrar en las naves de la fábrica, se oyó un golpe de campana y, repentinamente, las cigarreras se echaron sobre los hombros los mantones y arreglaron el desorden del tocado. Las más coquetas procuraban arreglarse los cabellos y ponerse una flor en la oreja. El intruso era contemplado con aire burlón; por su parte, él observaba que casi todas eran hermosas y, en el claroscuro de la sala-taller con arcos que evocan un ambiente conventual, piensa en las Hilanderas de Velázquez,adelantándose casi cincuenta años a Gonzalo Bilbao.{...} (2)
Jules Claretie 1869.

Museo de Bellas Artes de Sevilla
Portal de Museos y Conjuntos Arqueológicos y Monumentales de Sevilla
Las Cigarreras
Gonzalo Bilbao Martínez
Óleo- 1915
305 x 402 cm
Cuarenta y seis años después, la plástica del pintor Gonzalo Bilbao Martínez, recrea en su más celebre lienzo inspirado en las cigarreras; el ambiente de un día de trabajo de las operarias de la Real Fábrica de Tabacos de Sevilla, las dimensiones del cuadro nos sitúan a través del tiempo directamente en el recinto, el primer plano es para la madre trabajadora amamantando a su hijo ante la sonrisa complacida de sus compañeras de mesa, mientras las demás siguen en sus labores a lo largo del corredor.

La luz penetra por las claraboyas de la nave y baña en claridades y en claroscuros los colores y las formas de la composición velazqueña. Maestro de toda una generación firma un cuadro costumbrista regionalista y simbolista al mismo tiempo. Son Las cigarreras del maestro sevillano, inmortalizadas cruzando el puente de Triana, en el interior de la fábrica de tabacos, saliendo de la misma o paseando por el puerto.

Salida de la Fábrica de Tabacos
Gonzalo Bilbao Martínez
Óleo
Las cigarreras encarnan de un modo muy realista y romántico, la red socioeconómica de algunas ciudades españolas en el último tercio del siglo XVIII y a lo largo del siglo XIX, un colectivo numeroso de mujeres en diferentes regiones de España trabajaron en las fábricas de tabacos de Andalucía (Sevilla 1725 y Cádiz 1730), Valencia (Alicante 1801), Madrid (1809), y Asturias (Gijón 1823) entre otras. La Factoría de Cádiz que entra en funcionamiento en 1730 es la primera en emplear mano de obra femenina.

Interior de la Fábrica de Tabacos
Gonzalo Bilbao Martínez
Óleo
La primera instalación permanente se creé, fue la de San Pedro de Sevilla en 1620,hasta que finalmente se construye la Real Fábrica de Tabacos de Sevilla en 1756.La producción conocida en principio era la de tabaco en polvo y rape, labor, que estuvo a cargo de hombres. Las primeras fábricas especializadas en la elaboración de cigarros (puros o tabaco) y cigarrillos no aparecen hasta principios del siglo XIX.Los primeros pasos se dieron a fines del siglo XVIII ante el aumento vertiginoso de la demanda de cigarros, en detrimento del polvo.

Salida de la Fábrica de Tabacos
Gonzalo Bilbao Martínez
Óleo 1905
Tras la particular paleta de Julio Romero Torres, nuevas tendencias llegan desde afuera, el luminismo mediterráneo de Joaquín Sorolla y el impresionismo Andaluz de Gonzalo Bilbao Martínez y Gustavo Bacarisas.El pintor sevillano hereda a través de su sólida formación y destreza, algunos de los valores universales de la pintura española. La luz ,el color y el ambiente de su ciudad natal presentes en sus obras, reúnen semblanzas de la Sevilla de su tiempo.

Gonzalo Bilbao fue objeto de un homenaje público por parte de las cigarreras, que acudieron en larga caravana de coches de caballos hasta la estación de ferrocarril, vestidas con sus mejores galas y su característico bullicio, para recibir a "su pintor" de regreso de Madrid de la Exposición Nacional de 1915.

Dedicado a Desde mi ventana.

Fuentes y notas.
(1)Gautier, Théophile .Viaje a España. Edición y traducción de Jesús Cantera Ortiz de Urbina. Madrid: Cátedra, 1998*
(2)Alma Mater Hispalense. Las cigarreras de Sevilla en la literatura. Obtenido el 9 de abril de 2010 en http://personal.us.es/alporu/fabricatabaco/cigarreras_literatura.htm

*Nota.
Sevilla: Las cigarreras.
Nos llevaron a los talleres donde se enrollan los cigarro puros. Quinientas o seiscientas mujeres están empleadas en esta preparación. Cuando pusimos el pie en su sala, nos vimos asaltados por un huracán de ruidos: todas aquellas mujeres hablaban, cantaban y discutían todas a la vez. Jamás había oído un alboroto semejante. La mayoría eran jóvenes: y había algunas muy guapas. La sencillez extrema de su ropa y el poco cuidado con que la llevaban puesta permitía apreciar sus encantos con plena libertad. Algunas tenían con toda decisión en el ángulo de la boca un cabo de cigarro puro con el mismo aplomo que lo podría tener un oficial de húsares; otras, ¡oh musa, ven a ayudarme!, otras mascaban el tabaco lo mismo que los viejos lobos de mar. Y es que se les permite coger todo el tabaco que puedan consumir en su puesto de trabajo. Ganan de cuatro a seis reales al día. La cigarrera de Sevilla es un tipo, como lo es el de la manola de Madrid. Hay que verla, el domingo o los días de corridas de toros, con su basquiña con unos inmensos volantes como flecos, sus mangas con botones de azabache, y el puro cuyo humo aspira, y que pasa de vez en cuando a su galán.
Gautier, Théophile . Viaje a España. Edición y traducción de Jesús Cantera Ortiz de Urbina. -- Madrid :Cátedra, 1998 PR N GAU via:http://www.juntadeandalucia.es/cultura/opencms/opencms/system/galleries/download/bibsevilla/viajeros.pdf

(3)La Real Fábrica de Tabacos de Sevilla. Entre 1751 y 1756 se terminaron la mayor parte de los trabajos referidos a la actividad de fabricación,comenzando la actividad productiva durante el verano de año 1758.En febrero de 1813 se creaba el denominado; Establecimiento de mujeres.

Enlace relacionado:
Mi espacio flamenco: Carmen

Audio:
Jorge Pardo.Flauta.
Vente conmigo (Tangos)