17 ago 2007

Julio Romero de Torres I parte/Apuntes




Jorge Pardo
Dos siglos (soleá)
Vientos flamencos
Saxo soprano: Jorge Pardo,
Guitarra: El Paquete
Cante: Antonio Carbonell

Julio Romero de Torres
Pintor español
Córdoba 1874 -Córdoba 1930
Apuntes (I)

Julio Romero de Torres influenciado por la corriente francesa del cartel como medio de comunicación publicitaria (La publicidad también reclamó las obras del maestro cordobés); pintó cuatro cuadros para ilustrar los almanaques de la Unión Española de Explosivos, los lienzos recogen el singular lenguaje del pintor en los calendarios de UEE en los años 1924, 1925,1929 y 1931.

Elisa Muñiz
"Encendiendo la mecha"
Calendario 1924
La modelo es la bailarina sevillana Elisa Muñiz; “Amarantina”. Sonriente enciende la mecha de un cartucho de dinamita con un cigarro para el cartel de 1924; detrás de ella una mina infierno, dejando para el espectador la interpretación de la escena. “Amarinta” posó en reiteradas ocasiones para el pintor, representa la mujer típica de la iconografía del cordobés.

Elena Pardo
"La escopeta de caza"
Calendario 1929


Las lágrimas se asoman en los ojos de Elena Pardo mientras se aferra a la escopeta. Un velado mensaje de un drama que puede estar por comenzar, o quizás, el final de uno; a juzgar por su mirada de profunda tristeza en el cuadro "La escopeta de caza" para el Calendario de 1929. Elena fue el rostro y la figura de por lo menos 17 lienzos del autor: Marta (1926), Mary luz (1929) y En la ribera (1928) entre otros.

Natalia Castro
"Mujer de la pistola"
Calendario 1925
Calendario 1925, Mujer con Pistola,Natalia posa de perfil; nerviosa con gesto dramático observamos su mano apoyada en el alféizar, los dedos crispados presagian un evento fatal.¿Se defiende de alguien?¿ Está a punto de vengarse? Una escena llena de suspenso que también debe resolver el espectador.

Carmen Gabucio
"El cohete"
Calendario de 1931

Romero de Torres fallece en 1930, El Cohete es el candelario de 1931, justo unos meses antes de que el calendario viera la luz pública. Probablemente, fue pintado en 1929, a la par de que la Escopeta de caza, pero esta vez la modelo; segura, altiva y feliz enciende un cohete.

Posa Carmen Gabucio, revestida de un inconfundible aire andaluz, la modelo mejicana convertida por él, en La Virgen de los Faroles.






Apuntes biográficos.

Julio Romero de Torres (9 de noviembre de 1874 - 10 de mayo de 1930) fue un pintor español. Nació y murió en Córdoba, donde pasó gran parte de su vida.

Hijo del también pintor y conocido Rafael Romero y Barros, director del Museo Provincial de Bellas Artes de Córdoba, comenzó su aprendizaje a las órdenes de su padre en la Escuela Provincial de Bellas Artes de Córdoba a la temprana edad de 10 años. Gracias a su afán por aprender, vivió intensamente la vida cultural cordobesa de finales del siglo XIX y conoció ya desde muy joven todos los movimientos artísticos dominantes de esa época. En 1890 realiza lo que sería su primera obra conocida La huerta de los Morales.


Julio Romero de Torres participó con intensidad en todos los acontecimientos artísticos de Córdoba y España. Ya en el año 1895 participó en la Nacional en Madrid, donde recibió una mención honorífica. También participó en las ediciones de 1899 y 1904, donde fue premiado con la tercera medalla. En esta época inició su experiencia docente en la Escuela de Bellas Artes de Córdoba.

En 1906, el Jurado de la Nacional rechazó su cuadro Vividoras del Amor, lo que provocó que el Salón de Rechazados fuera más visitado que las salas de la Exposición Nacional. Ese mismo año marchó a Madrid, para documentarse y satisfacer su inquietud renovadora. Después realizó viajes por toda Italia, Francia, Inglaterra y los Países Bajos. En 1907 concurrió ya con los pintores más renombrados de la época a la exposición de los llamados independientes en el Círculo de Bellas Artes. Poco después obtuvo por fin su primera medalla en la Nacional del año 1908 con su cuadro Musa gitana. También recibió el primer premio en la Exposición de Barcelona de 1911 con el Retablo de amor, y dos años después en la Internacional de Munich del año 1913. En la Exposición Nacional de 1912, cuando Romero de Torres aspiraba a la medalla de honor, su obra no fue reconocida, lo que provocó que sus admiradores le entregaran una medalla de oro cincelada por el escultor Julio Antonio. Cuando sus cuadros tampoco fueron premiados en la Exposición de 1915 con la medalla de honor decidió retirarse definitivamente de las Exposiciones Nacionales.

En 1916 se convirtió en catedrático de Ropaje en la Escuela de Bellas Artes de Madrid, instalándose definitivamente en la capital. A partir de aquí, su obra comenzó a representar el pabellón español en diversos certámenes internacionales, convocados en París], Londres, etc. Sin embargo, el gran momento de éxito se produjo en Buenos Aires, el año 1922. En agosto de ese mismo año Julio Romero de Torres había viajado a la República Argentina acompañado de su hermano Enrique, y en los últimos días de este mismo mes se inauguró la exposición, que fue presentada en el catálogo por un espléndido texto de Ramón Valle-Inclán. La muestra constituyó un éxito sin precedentes.

Fue miembro de la Real Academia de Córdoba y de la de Bellas Artes de San Fernando. También exhibió su obra en la Exposición Iberoamericana de Sevilla en 1929, y en múltiples exposiciones individuales en nuestro país y en el extranjero. El 18 de diciembre de 1922 el Ayuntamiento de Córdoba lo nombró Hijo Predilecto de la ciudad.
A principios de 1930, Julio Romero de Torres, agotado por el exceso de trabajo y afectado de una dolencia hepática, volvió a su Córdoba natal para tratar de recuperarse. Pintando en su estudio de la Plaza del Potro, realizó entre los meses de enero y febrero la que sería su obra final y más célebremente conocida, La chiquita piconera.

El 10 de mayo de 1930 moría Julio Romero de Torres en su casa de la Plaza del Potro en Córdoba, hecho que conmocionó a toda la ciudad. Las manifestaciones de duelo general que produjo su muerte, en las que participaron en masa desde las clases trabajadoras más humildes hasta la aristocracia cordobesa, dejaron patente la inmensa popularidad de que gozaba el pintor cordobés.

Casado con Francisca Pellicer,-hermana del escritor,poeta y dramaturgo Julio Pellicer-, tuvo tres hijos Rafael Romero de Torres Pellicer, Amalia y María.

El grueso de su obra se encuentra en Córdoba en el Museo Julio Romero de Torres, donde se puede admirar el amplio repertorio de cuadros que fueron donados por su familia, por coleccionistas privados o comprados por el Ayuntamiento. Entre las obras más destacadas de este maestro figuran Amor místico y amor profano, El Poema de Córdoba, Marta y María, La saeta, Cante hondo, La consagración de la copla, Carmen, y por supuesto, La chiquita piconera.
Las características principales de su obra pueden resumirse en simbolismo, precisión de forma y dibujo, luz suave en ropajes y carnes, extraña luz de escenarios, Poética artificiosidad de escenarios, Dominio de la morbidez,Capacidad enorme para representar la figura humana, Paisajes que refuerzan el simbolismo, Paisajes donde la realidad se convierte en alegoría , Paisajes listos para ser degustados por el alma "sin detenerse en la superficie coriácea de las cosas y Paisajes desmaterializados para su última vivencia con el espectador "(1).

(1)Cordobapedia.
ZURERA TORRENS, FRANCISCO. "Julio Romero de Torres y su mundo", Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Córdoba,1987.


Cronología.

De 1890 es su primera obra conocida y fechada,"La huerta de Morales".
En 1892 realiza el retrato del periodista Francisco Borja Pavón para la portada del seminario cordobés Revista Meridional.
A las clases de pintura de Romero Barros asisten, además de sus hijos Rafael, Enrique y Julio, los jóvenes Mateo Inurria y Rafael Hidalgo de Caviedes.

Recibe la medalla de Primera Clase en la asignatura de natural, o modelo vivo, de la Escuela de Bellas Artes de Córdoba.

Son años de bohemia en que frecuenta los cafés y asiste a veladas flamencas.

En 1895 pinta "Mira que bonita era" que presenta a la Exposición Nacional de Bellas Artes donde obtiene una Mención Honorífica. El Estado adquiere el cuadro para el Museo de Logroño.

Con motivo de este primer triunfo, el 3 de marzo se organiza en Córdoba, un banquete homenaje.

Muere su padre.

1896, Enrique, su hermano, sucede a su padre en la dirección del Museo Provincial de Bellas Artes.

Julio Romero de Torres comienza a colaborar en las obras de recuperación y conservación del patrimonio artístico cordobés, restaurando la cubierta de la Mezquita Catedral.

1897, toma parte en las oposiciones destinadas a conseguir una beca en la Academia Española de Roma. Presenta "Conciencia tranquila", pero no obtiene la beca.

1898, el pintor vive en estos años intensamente la vida cultural cordobesa. Frecuenta la Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes, presidida por Teodomiro Ramírez de Arellano; el Ateneo y la Sociedad Económica de Amigos del País.

Se mueve entre escritores y artistas como Mateo Inurria, Rafael García Lovera o Guillermo Belmonte Muller.

Muere su hermano Rafael.

Pinta, junto con su hermano Enrique, el panel del techo de la barbería del Círculo de la Amistad, "Rosas en la balconada"

1899, obtiene la Tercera Medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes por su cuadro "Conciencia tranquila".

El 30 de mayo, se le tributa un banquete homenaje en Córdoba donde recitan poemas en su honor Salvador Rueda y Manuel Reina.

El 30 de octubre contrae matrimonio con Francisca Pellicer y López. De esta unión nacerán sus hijos Rafael, Amalia y María.

1900-1901, instalados en la casa paterna de la Plaza del Potro, donde también vive su hermano Enrique, se dedican a embellecerla mostrando en sus jardines y salones los restos arqueológicos y las obras escultóricas que había recuperado su padre.

En la misma casa los hermanos Romeros de Torres instalan el estudio conjuntamente.

1902, el 14 de agosto es nombrado profesor numerario de la Cátedra de Colorido, Dibujo y Copia.

Cesa el 12 de septiembre al ser suprimida la escuela que había fundado su padre.

1903, desempeña la plaza como profesor agregado en la recién fundada Escuela Superior de Artes Industriales, dirigida por Mateo Inurria.

1904, obtiene la Tercera Medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes por su cuadro "Rosarillo"

Pinta "Mal de amores"

Vuelve a Madrid con la intención de buscar documentación sobre pintura mural e informarse sobre los simbolistas franceses debido al encargo de la realización de unos murales para el Círculo de la Amistad de Córdoba.

En su larga estancia en Madrid se acerca al círculo de Ramón del Valle Inclán e intensifica su amistad con Manuel Machado. Frecuenta el piso que comparte con su hermano Antonio en la calle Fuencarral donde establecen una especie de "Academia de Poesía" modernista. También frecuenta el otro foco modernista madrileño que es el domicilio del poeta Francisco Villaespesa .

1905, en la primavera termina de pintar los murales para la escalera principal del Círculo de la Amistad. Son seis murales relacionados con las artes y las letras, cuatro de ellos dedicados respectivamente a la pintura, la escultura, la música y la poesía, los dos restantes se denominarán "Canto de amor" y "El genio y la inspiración".

Sus amigos Luis Aguilera Coca, Francisco Alcalá y Julián Gayo le piden que se ocupe de decorar la bóveda y las capillas laterales de la iglesia parroquial en la Asunción de Porcuna, Jaén.

1906, presenta "Vividoras del amor" en la Exposición Nacional de Bellas Artes causando gran escándalo al ser rechazado por su tema. Los periódicos y semanarios madrileños escribieron denunciando el hecho.

Julio Romero de Torres, Antonio Fillol y José Bermejo, de quienes también habían rechazado sus cuadros por parecidos motivos, deciden montar una exposición en un pequeño local de la calle Alcalá. La exposición se llama "Rechazados por inmorales en la Exposición Nacional de Bellas Artes" y tiene un enorme éxito popular.

Con este motivo se celebra un banquete homenaje a Romero de Torres en el restaurante "La Huerta" de Madrid.

1907, participa en la Exposición del Círculo de Bellas Artes de Madrid junto a los "pintores independientes": José Gutiérrez Solana, Ricardo Baroja, Daría de Regoyos y Anselmo Miguel Nieto. Presenta los cuadros"Bendición", "Carmen" y "Fuensanta".

Frecuenta la tertulia nocturna que mantenía Ramón del Valle Inclán en el Café de la calle Arenal a la que asistían, entre otros, los pintores Ignacio Zuloaga, Ricardo Baroja, José Gutiérrez Solana, Rafael de Penagos, Moya del Pino, Leandro Oroz, Anselmo Miguel Nieto y ángel Vivanco.

Participa en una Exposición de Pintura Española que se celebra en París con "Vividoras del amor".

Viaja a Francia, Inglaterra, Italia, Suiza, Países Bajos y Marruecos.

1908, expone "La musa gitana", "Nuestra Señora de Andalucía" y "Amor místico y amor profano" en la Exposición Nacional. Obtiene la Primera Medalla por "La musa gitana" y el cuadro es adquirido por el Estado.

Jacinto Benavente escribe un artículo muy elogioso en el Imparcial por lo que Romero de Torres acude al café El Gato Negro, donde tenía su tertulia Benavente, para agradecérselo personalmente.

Pocos días después, pinta un pergamino para la portada del álbum que le dedica la Asociación de la Prensa a Benavente con motivo del triunfo de su obra "Los intereses creados".

Se celebran en Córdoba, con motivo del éxito obtenido en Madrid, dos banquetes homenaje. El primero de carácter intelectual y artístico, el segundo de marcado acento popular, organizado por obreros cordobeses.

1910, participa en las Exposiciones Internacionales de Pintura Española que se celebran en Buenos Aires y en Santiago de Chile. Ramón del Valle Inclán pronuncia una serie de conferencias en Buenos Aires en las que presenta a Julio Romero de Torres como primer pintor español.

Los hermanos Valentín y Ramón de Zubiaurre visitan Córdoba y Romero de Torres pinta el boceto y el retrato de"Ysolina Gállego de Zubiaurre".

Presenta en la Exposición Nacional sus obras "El retablo del amor", "ángeles y Fuensanta" y el retrato de "Ysolina Gállego de Zubiaurre". Al ser postergado por el jurado recibe un apoteósico recibimiento en Córdoba evidenciando la repulsa de la ciudad a esa decisión. Los alumnos de la Escuela de Artes y Oficios se declaran en huelga. El 27 de mayo se le ofrece un homenaje de desagravio en el Café Suizo al que llega un telegrama del Gobierno comunicándole la concesión de la Encomienda de la Orden Civil de Alfonso XII y el nombramiento de inspector de la Delegación y Comisaría Regia en la Exposición de Arte en Roma. También se le comunica la adquisición por el Estado de su "Retrato de Ysolina Gállego".

Se recibe un mensaje de adhesión de los artistas e intelectuales sevillanos pero, quizás, el homenaje más valioso lo aportan los cordobeses al comprar por suscripción popular el cuadro "ángeles y Fuensanta" para el Ayuntamiento de Córdoba.

En Navidad, Ramón del Valle Inclán le convence para que envíe "El retablo del amor" a la Exposición Internacional de Barcelona.

1911, se inaugura la VI Exposición Internacional de Bellas Artes en Barcelona en la que Romero de Torres recibe la Medalla de Oro por su "Retablo del amor" que es comprado por el Museo de Arte Contemporáneo de esta ciudad.

Es recibido triunfalmente en Barcelona donde le ofrecen un banquete homenaje organizado por Miguel Utrillo.

De vuelta a Córdoba frecuenta la bohemia y las tertulias de los Cafés Suizo, La Perla, Colón y Gran Capitán. También es asiduo del Club Guerrita, en la calle Gondomar en el que preside el retrato que le hiciera unos años antes. Allí conoce a Rafael González Madrid, "Machaquito", a quien retrata y a quien incluye en su obra "La Consagración de la Copla".
Recibe la visita de Miguel de Unamuno.
Al enterarse del enorme éxito del estreno en Granada del drama poético" El Alcázar de las perlas" de su amigo Francisco de Villaespesa, consigue que la compañía de María Guerrero y Fernando Díaz de Mendoza la estrenen en el Gran Teatro de Córdoba. Al estreno también asiste el autor.

1912, presenta en la Exposición Nacional los cuadros "La sibila de las Alpujarras", "La consagración de la copla", "Las dos sendas" y los retratos de "Pastora Imperio" y "Adela Carboné". Vuelve a no ser premiado y se le ofrece, otra vez, un banquete de desagravio en el restaurante al aire libre del parque del Retiro. De este banquete, surge la idea de hacer entrega al pintor de una Medalla de Oro, como homenaje popular, costeada por suscripción pública y de la que recibe el encargo el escultor Julio Antonio.

En diciembre es elegido académico numerario de la Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba.

1913, frecuenta, en Madrid, la tertulia de la "Sagrada Cripta del Café de Pombo" que preside Ramón Gómez de la Serna y a la que asisten los hermanos Zubiaurre, Victorio Macho, Francisco Iturrino, Solana, Santiago Rusiñol, Bagaría, Bartolozzi, Bacarisse, Manuel Abril, Ramiro de Maeztu o Guillermo de Torre.

También frecuenta la nueva tertulia de Valle Inclán en el Café Fornos.

Carmen de Burgos, Colombine, a quien retrata habla en Buenos Aires sobre "El alma española a través de la pintura de Romero de Torres".

Retrata al entonces novillero Juan Belmonte y es uno de los organizadores, junto a Valle Inclán, Julio Antonio, Ramón Pérez de Ayala y Sebastián Miranda, del homenaje que se le brinda cuatro meses antes de tomar su alternativa.

Acaba "El Poema de Córdoba".

1914, con motivo del estallido de la Guerra Europea, firma el manifiesto de los intelectuales españoles en pro de la defensa de los valores espirituales y a favor de la causa aliada.

1915, se le adjudica una sala especial en la Exposición Nacional donde presenta "El Poema de Córdoba", "La gracia", "Carmen", "Bendición, "El pecado" y "Eva gitana".

Ramón Gómez de la Serna y Luis Bagaria le ofrecen un homenaje en el Café Pombo.

Juan Belmonte adquiere "Carmen", hecho que tiene amplia resonancia popular y que se refleja en los títulos de los artículos que aparecen en la prensa.

Con motivo del concurso del Monumento a Cervantes para la nueva Plaza de España en Madrid, Julio Romero de Torres participa en el proyecto que presenta el arquitecto Antonio Flores y en que colabora, además, el escultor Julio Antonio.

Se instala, en un piso de la Carrera de San Jeronimo, núm. 15 de Madrid.

1916, en marzo es nombrado Profesor de Ropaje de la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando. Por medio de su amigo el dentista real, Florestan Aguilar que le cede el local, instala su estudio en la calle Pelayo, 73

Instalado en Madrid, se incorpora al ambiente cultural de la época, se hace socio del Ateneo, asiste al Círculo de Bellas Artes al que pertenece, y frecuenta a Valle Inclán que también ha sido nombrado catedrático de Estética de la Escuela de San Fernando.

Pinta "Marta y María".

1917, frecuenta el café Maisón Doré en el que se reúne una tertulia modernista compuesta por Jacinto Benavente, Manuel y Antonio Machado, Anselmo Miguel Nieto, Sebastián Miranda, Enrique Gómez Carrillo y Francisco Villaespesa.

1918, en noviembre se inaugura una exposición individual en el Majestic Hall de Bilbao. Con este motivo, la Sociedad Bilbaína celebra un homenaje en su honor.

1919, participa con su cuadro "Marta y María" en la Exposición de Pintura Española celebrada en Londres.

En abril participa con "La musa gitana" en otra Exposición de Arte Español que se celebra en París.

1920, en enero el Ayuntamiento de Córdoba acuerda bautizar una calle con su nombre y, para titularla, se abre una suscripción popular.

Visita Italia acompañado de Francisco Iturrino y de Guillermo Belmonte Muller.

1921, pinta el cartel de la "Gran Corrida de Toros Patriótica" organizada por la reina Victoria, a beneficio de las víctimas de Annual.

Adquiere carácter de homenaje popular la instalación de una reproducción de azulejos del cuadro "La saeta" en la cordobesa plaza de Capuchinos.

Francisco Villaespesa regresa de su triunfal gira por América del Sur y le informa de lo conocido y admirado que es en Buenos Aires.

1922, participa en el homenaje a Antonio Muñoz Degrain que le rinde el Círculo de Bellas Artes. También participa en el homenaje a Valle Inclán en el Café Fornos y al que se tributa a Encarnación López, La Argentinita.

En agosto viaja a Buenos Aires con motivo de su exposición en la Galería Witcomb. El éxito es multitudinario. Vende todas sus obras expuestas salvo dos, "La muerte de Santa Inés" y "Bendición" que no están a la venta. El Museo Nacional de Bellas Artes adquiere "Musidora", "Rivalidad" y "La esclava".

Regresa el 21 de noviembre. En Madrid se celebra un banquete homenaje en el Hotel Ritz al que asisten José Sánchez Guerra, Presidente del Gobierno y el embajador de Argentina.

El 18 de diciembre el Ayuntamiento de Córdoba le nombra "Hijo predilecto de la ciudad" y se inaugura una exposición de su obra en el Círculo Mercantil.

1923, fallece su amigo Francisco Iturrino.

Recibe, el 14 de julio, la visita en su estudio de la reina María Cristina.

1924, muere su amigo el escultor Mateo Inurria.

Pinta el primer cartel de una serie encargada por la Compañía de Explosivos Río Tinto.

1925, el rey Alfonso XIII acude a su estudio de Córdoba durante su visita a la ciudad en el mes de enero.

Preside el Jurado del Concurso de Cante Hondo celebrado en el Teatro Pavón de Madrid.

1926, los salones de su estudio de la calle Pelayo se convierten en centro de reuniones y tertulias. Por este motivo, el director de cine Francisco Gómez Hidalgo le pide filmar varias escenas de su película La malcasada en su estudio. En la película se puede ver a Julio Romero de Torres, a escritores y personalidades madrileñas como Valle Inclán, Azorín, Natalio Rivas, Santiago Rusiñol o Ignacio Sánchez Mejías; y a personajes de moda entonces como los hermanos Franco, Francisco por ser el general más joven del ejercito y Ramón el héroe de la aviación española por su vuelo transoceánico en el Plus Ultra.

1927, se vuelca con mayor intensidad en el retrato femenino.

De esta época son "Marta" ,"Eva" y "ángeles"

Pinta "La copla".

1928, pinta "La Virgen de los Faroles" que es colocada en el retablo de la fachada norte de la Mezquita Catedral. Se instala, solemnemente, el día de la Asunción. En la actualidad se exhibe una copia realizada por su hijo Rafael y el original está expuesto en el museo de Córdoba.

Comienza a sentir los primeros síntomas de enfermedad que achaca al cansancio dejando de pintar durante una temporada. Al no mejorar, consulta a los médicos que le diagnostican una grave dolencia hepática y pulmonar.

1929, muere su amigo Guillermo Belmonte Muller.

Marcha a Córdoba para cuidarse y reponerse de su enfermedad. Aún así, no deja de pintar. "Ofrenda al arte del toreo", "Cante Hondo" y "La nieta de la Trini". Se inaugura la Exposición Iberoamericana de Sevilla.

1930, en la Exposición Iberoamericana que se celebra en Sevilla, expone un total de veintiocho cuadros en el pabellón de la Casa de Córdoba.

Entre enero y febrero concluye "La chiquita piconera".
*(pelicula homenaje que hizo Miguel Ángel Entrenas.)

Josephine Baker llega a Madrid y expresa su deseo de ser pintada por Romero de Torres.

Su enfermedad se agrava y el 10 de mayo muere.

El luto y duelo de la ciudad es completo. Cierran los comercios, casinos, teatros y tabernas. El féretro se expone en el Salón del Museo Provincial. Durante el cortejo, al que asiste el ministro de Gracia y Justicia en representación del rey, su féretro es llevado a hombros por los obreros cordobeses. Es enterrado en el cementerio de San Rafael en un terreno cedido a perpetuidad por el Ayuntamiento.

Se abre una suscripción popular, con una cuota máxima de una peseta, para levantar un monumento a su memoria.

El 24 de Julio su hijo Rafael cierra el estudio de la calle Pelayo de Madrid y declara que las obras de su padre no serán vendidas, sino que quedarán en propiedad del Museo que piensa dedicar la familia en su casa de Córdoba, a la memoria del pintor.

Obtenido en:http://webs.ono.com/joseams/jromero.htm
Julio Romero de Torres.